* Comprar a otras naciones y
cerrarles la llave a los gringos
* Acuerdo nacional y
convocatoria a la unidad, ¿con quién?
Después de 10 días del nuevo
gobierno en Estados Unidos, cientos de actores de la sociedad mexicana
expresaron sus opiniones y propuestas sobre cómo actuar ante el racista
presidente, sin que hasta el momento el gobierno federal allá tomado algunos
pasos para establecer una estrategia que permita la defensa de los intereses
nacionales ante la agresión del vecino del norte.
Todos contra Trump ha sido la
respuesta de los mexicanos de todos los colores y posiciones sociales, se ha
propuesto incluso movilizar a todo el país para que se manifieste en contra de
las agresiones del vecino del norte, que se llame a la unidad nacional, pero
nadie encuentra quién podrá hacerlo ante un gobierno con escaso reconocimiento
por la población. Hasta las Iglesias han participado y anunciado su apoyo a los
migrantes en EU.
Un país ensangrentado como el
nuestro en lo que va de este siglo, con instituciones desacreditadas, partidos
políticos desaprobados, gobernantes sin consenso, corrupción e impunidad en
todos sus poros, justificado por el gobierno y sus corifeos como algo cultural,
no puede hacer frente a las amenazas del exterior.
Propuestas como la de comprar
el maíz, que antes producíamos y hasta exportábamos, a países sudamericanos,
pondría en conflicto a estados que votaron por Trump contra su ahora
presidente. Que el Superbowl no tenga guacamole sería noticioso.
Incluso, el ex embajador de
México en la ONU, Porfirio Muñoz Ledo, fue contundente al afirmar que los
decretos ejecutivos de Trump son una declaración de guerra por la que se le
puede demandar a EU, ante Naciones Unidas, por violación masiva de los derechos
humanos de millones de migrantes.
Así que acciones hay muchas y
contrario a ello se conocen pláticas de los presidentes de México y Estados
Unidos para negociar en privado el muro, cuando lo que debió haber pedido
nuestro país es que ese tema no debe de estar en la relación bilateral
siquiera, porque no debe de existir valla alguna entre países, como lo ven los
cosmonautas desde el espacio.
Y es que los gobiernos al ir
desmantelando a las instituciones han llevado al país a la quiebra total, la
miseria crece pese a millonarios presupuestos para combatir la pobreza, la
sociedad se divide y las instituciones desaparecen ante la corrupción e
impunidad.
Por ello se habla de
desarrollar el mercado interno ahora, el cual está olvidado ya que antes México
era el granero de la Nación y hasta exportábamos, pero ahora hasta para hacer
las tortillas tenemos que comprarles el maíz a los gringos. Tenemos petróleo,
pero compramos la gasolina en el extranjero. Y así podemos enumerar otros
productos que antes teníamos aquí y ahora se importan, hasta las banderas para
septiembre, llegan de China.
En el actual estado de
descomposición social, quiebra económica y política, Trump nos agarra de piñata
y un gobierno con poca aceptación social, que no puede hacer nada más que
esconderse y esperar que nos destrocen. Tendrá que ser la sociedad al resonar
el coro del Himno Nacional: mexicanos al grito de guerra, el que podrá
responder a las agresiones de los gringos. ¿O quién?
¿QUÉ HARÁN?
Francisco Martínez Neri señaló
que su bancada del PRD, insistirá en implementar un “gran acuerdo de
solidaridad nacional, una amplia convergencia, un acuerdo en defensa de la
Nación”.
El oaxaqueño aseveró que se
requiere ser incluyente, debatir y construir consensos con el Congreso, las
universidades, los gobiernos locales, los organismos empresariales las
organizaciones sociales, los organismos civiles y no gubernamentales. “Los
agraviados somos todos y todos debemos acordar como enfrentar las amenazas que
provienen del exterior”, subrayó.
“Para que el gobierno tenga
éxito en la tarea de recuperar la cohesión social debe frenar y revertir las
políticas que han polarizado y generado tensión en la sociedad. Eso significa
revisar la política económica y los incrementos a los combustibles. Si el
gobierno manda un mensaje de cerrazón y oídos sordos al reclamo, no se generará
una sólida confluencia nacional”, apuntó.
“Estamos a días de que
comience el mes de febrero y con ello vendrán más aumentos a la gasolina, lo
mínimo que esperaríamos del gobierno es frenar esos aumentos, ya que con ello
se mostraría que quiere generar unión”.
Manifestó que “no se le puede
pedir al pueblo ser solidario cuando se atenta contra su economía. Por ello, su
bancada seguirá insistiendo en dar marcha atrás al gasolinazo, no solo eso sino
también evitar los nuevos incrementos”.
Destacó que los diputados del
PRD no acudieron a Los Pinos a legitimar ningún acuerdo, “fuimos a exigirle al
presidente que no lastime más a las familias mexicanas y lo proteja de las
amenazas que provienen de los Estados Unidos”.
ACUERDO NACIONAL
Por su parte, el coordinador
del PAN, Marko Cortés, las circunstancias exigen que el Presidente de la
República convoque a un Acuerdo Nacional por la Defensa de México, con la
participación plural e incluyente de los poderes de la Unión.
Que cuente con la participación
de representantes empresariales y sociales para que de forma conjunta se
emprendan acciones que abonen a la buena vecindad, al respeto de los derechos
humanos y a las ventajas de un libre comercio.
Aseguró que de esta manera se
estaría respondiendo de forma organizada a las medidas emprendidas por el
presidente de Estados Unidos, Donald Trump. La convocatoria para este acuerdo
nacional debe ser de manera incluyente.
“Sin dejar de lado nuestras
diferencias políticas, ante la amenaza externa es necesario propiciar un
ambiente de unidad nacional”, subrayó el dirigente parlamentario.
Al formular las propuestas de
los bicolores para contribuir a la defensa de los intereses de la nación,
explicó que de inmediato se deben destinar los recursos a las embajadas y los
consulados para apoyar la defensa de los connacionales, ante la inminente
deportación masiva en los estados de la Unión Americana, sobre todo las
llamadas “ciudades santuario de inmigrantes”.
CONSTITUCIÓN CDMX
Los diputados constituyentes, con
muchas acotaciones, acabaron la primera Constitución de la Ciudad de México,
con la derogación del fuero, la revocación de mandato con un candado de 40% de
participación electoral para ser válida, el debate por los derechos de las
mujeres y los pueblos originarios, donde los conservadores de la derecha y el
gobierno, frenaban los avances de las demás fuerzas a favor de conservar y
ampliar derechos en la ciudad.
Mientras tanto, el Congreso de
la Unión comienza con su periodo ordinario con muchos pendientes: elegir a los
fiscales de la República y Anticorrupción, tres consejeros del INE, nuevo
gobernador del Banco de México, darle certidumbre jurídica al actuar de las
Fuerzas Armadas que otros opinan es legalizar la militarización del país ante
unas policías que en lo que va del siglo no se han mejorado, ejemplo del
comandante mexiquense que sigue en su puesto habla por sí solo.
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