LINARES MORALES, EL MAYATE, LLEGA COMO JEFE A XALATLACO, EDOMEX.

* De la mano de su padrino el general Sergio Hernando Chávez García, el ex limpia botas en San Mateo Atenco, hoy es un consagrado policía corrupto quien logró subir peldaños gracias a sus cualidades de útil chismoso

Por J. MARTÍN PONCE R.

TOLUCA, Méx.- Reaparece el nefasto policía tercero, Juan Carlos Linares Morales,  “El Mayate”, ex jefe de región, quien se hiciera de mala fama por ser un mando corrupto, encargado de cobrar las cuotas a su escuadrón de policías voladores en Tenancingo, los cuales superaban el número de 200 y dejaban millonaria ganancia.



Su protector el general Sergio Hernando Chávez García, subsecretario de la policía estatal, quien se ha convertido en el Mesías de la corrupción revivió  al desprestigiado Linares Morales, quien ante la sorpresa de propios y extraños, está de regreso, vuelve por sus fueros y, queda claro, que el miliar en retiro encabeza una hermandad mafiosa al interior de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM).

Linares Morales se hizo odiar por la tropa en Tenancingo porque además de tratarlos con la punta del pie, se quedaba con las tarjetas de gasolina que cada quincena destina el gobierno del Estado de México para las patrullas, pero, dicha dotación se la quedaba el famoso “Mayate”, obligando a los uniformados a invertir de su raquítico salario, el dinero para la compra de combustible y poder salir a patrullar las calles o atender los llamados de auxilio de la sociedad.

El pasado 5 de marzo Linares Morales fue resucitado por su cómplice y protector, el general Chávez García, quien lo designó como jefe de servicios del Segundo Agrupamiento-Xalatlaco, perteneciente a la Región V- Santiago, donde al llegar hizo notar su presencia de un ser déspota y corrupto, cualidades que le han dado el rechazo general de la tropa, quizá a él no le preocupe esta situación, pero, debe saber que todo lo que sube baja, él ya lo experimentó, pero, todo parece indicar que no aprendió la lección.
A seis semanas de su regreso como mando, Linares Morales ya armó su escuadrón de policías voladores, entre quienes destacan Vinicio Quiroz Galván, José Luis Michua Guadarrama, Jaime Valencia Moreno, Julio Pérez Reza, Mayté Angélica Arias Gudiño, Fernando García Pérez, Miguel Ángel Carvajal Escalante, Héctor Linares Díaz, José Luis Tahuilán Zarza y René Gallegos Rayón, entre otros.
Toda esta pandilla tiene varios años de ser policías voladores; todos ellos, actualmente pagan a Linares Morales una cuota quincenal de 3 mil pesos. Este reportero tiene en su poder una lista donde aparecen nombres, grados y firmas, además de horarios de presuntas entradas y salidas al servicio, esto existe sólo en el papel, porque en la realidad, no se presentan a laborar, sino únicamente a cobrar cada quincena y, saben que tienen la obligación de dejar su “diezmo”.
Cabe subrayar que esta lista o fatiga –como también se le conoce en el medio policiaco-, está firmada por el jefe del Segundo Agrupamiento-Xalatlaco, policía tercero Juan Carlos Linares Morales, lo que demuestra que él es otro de los hombres clave para el general Chávez García.

NEGRA HISTORIA

La historia no miente, todo mundo sabe que Linares Morales fue bolero en San Mateo Atenco, daba bola a los policías estatales a quienes dejaban sus botas rechinando de limpio y brillando de corrupción. Luego ingresó al Colegio de Policía en el Valle de Toluca donde hizo su curso básico. Al egresar fue enviado al Segundo Agrupamiento en el poblado antes citado.
Fue el comandante José Luis Muñoz Álvarez, jefe de la Segunda Región quien lo apoyó y lo hizo parte de su escolta. De ahí Linares Morales se transformó, aprendió las malas mañas y se hizo famoso por ser un policía “arrastrado y chismoso” quien iba y contaba a su jefe todo lo que oía y veía. Esa era su principal cualidad: metiche, intrigoso y violento hasta la fecha.
Fue entonces que el comandante Muñoz Álvarez al descubrir esas cualidades en su pupilo, lo nombró jefe de turno en ese mismo agrupamiento; más tarde lo designó como jefe de Servicios en 2009. Quienes conocen a Linares Morales saben que su estatura no le ayuda, pero sí su boca de chismoso.
En aquel entonces el citado mando policiaco tenía el indicativo Beta 2. Posteriormente su jefe y protector Muñoz Álvarez fue nombrado subdirector operativo Regional-Valle de Toluca, mientras que Daniel Omifín Kildares Macario, fue designado jefe de la Segunda Región en San Mateo Atenco, con quien inició algo más que una amistad, una mancuerna de corruptos y sinvergüenzas. Desde entonces se vuelven inseparables.
Más tarde a Kildares Macario se la paró el águila, como se dice en el argot policíaco. Es nombrado subdirector Operativo Regional-Valle de Toluca y nombra a su incondicional Linares Morales como jefe de la Segunda Región y posteriormente en 2015, jefe de la primera Región en Toluca. En 2016 Kildares Macario fue removido por el comisario jefe Rogelio Cortés Cruz, titular de la Dirección General de Seguridad Pública y Tránsito del Estado de México, con el mismo cargo en Atlcomulco.
En aquel entonces Kildares se lleva con él a Linares Morales a quien nombró jefe de la Región XI-Atlacomulco, hasta que a finales de septiembre de 2017, Kildares Macario se estrena como coordinador de subdirecciones Operativas Regionales Sur y como es lógico, se lleva con él a su “chicle” Linares Morales a quien nombró jefe de la Región X-Tenancingo, hasta que a raíz de las publicaciones de ESCENA DELICTIVA donde se le exhibe como corrupto y mañoso, el general Chávez García lo remueve del cargo el 4 de agosto de 2018.
De esta manera, el flamante subsecretario de la policía estatal ocultó a su protegido en la región XVII-Otzoloapan, perteneciente a la subdirección operativa Regional Valle de Bravo, donde El Mayate pasó a ser un elemento más de la tropa. Esa es parte de su nebulosa y corrupta historia.  Y aún hay más.