Rogelio
Cárdenas Estandía
México, D.F.-
Vicente Fox Quesada pugna por la legalización de la mariguana, perdonar a los
narcotraficantes y volverlos empresarios, un proceso que acotaría el poder de
los cárteles y disminuiría la violencia, dice.
También cuenta por
qué se distanció de Felipe Calderón, a quien critica por haber dejado un saldo
sexenal de 80 mil muertos. En entrevista, en la oficina de su rancho San
Cristóbal, el ex presidente habla de Enrique Peña Nieto, Carlos Salinas de
Gortari, Ernesto Zedillo, Marcelo Ebrard, Andrés Manuel López Obrador y Miguel
Ángel Mancera.
El hombre que sacó
al Partido Revolucionario Institucional(PRI) de Los Pinos tiene en su oficina
la foto institucional de Enrique Peña Nieto, el político que hizo que el
tricolor regresara al poder presidencial.
Vicente Fox Quesada entrevistado en el rancho San Cristóbal, en Guanajuato, donde tiene
una réplica del despacho que ocupara enel periodo 2000-2006.
Ahí, entre sillas
de montar y acrílicos con fotografías delos jardines de Los Pinos, explica las
razones de su apoyo a la legalización dela mariguana.
-¿Por qué hay que legalizarla?-
“Primero. Eso les
reduciría poder económico a los cárteles. Segundo. Se vuelve un mercado
abierto, los mismos capos pueden ser empresarios el día de mañana”.
-¿Y los delitos del pasado? ¿Borrón y cuenta
nueva?-
“El perdón es una
de las grandes virtudes del ser humano, y el perdón en política y en gobierno
es de efecto inconmensurable. El perdón a los dictadores que se dio en
Argentina, que se dio en Chile, que se dio en España, que se dio a todos,
funcionó, permitió transitar a la democracia. Una vez que tú tienes a un “tipo”
sentado en una mesa ya “fregaste”, ya de ahí “pal” real, ya
es plática-plática-plática, negociación-negociación-negociación, y ya se acaban
los balazos”.
-¿Propone una mesa de diálogo con los cárteles?-
“No es necesario,
hay cosas que no tienes que escribir ni tienes que tratar públicamente y que
suceden. Ellos (los capos) de buena manera van a cambiarse, van a empezar a
decir “para qué ando aquí matándome, para qué ando arriesgando el pellejo, si
puedo ganar mi dinerito de manera limpia”, y pagando altos impuestos por
supuesto. En Washington y en Colorado la “tajada de león” se la lleva el
gobierno, y qué bueno”.
-¿La legalización es la solución?-
“Consumir drogas en
exceso nunca es bueno. La moderación en el consumo, la decisión responsable de
qué me conviene y qué no, es lo que funciona, pero para eso tú le tienes que
dar información al ciudadano. En cigarrillos se la estamos dando, imagínate que
ya en mariguana venga eso, formidable. Las prohibiciones no funcionan.
“Todos deberíamos
de saber que consumir droga es malo y, sin embargo, Steve Jobs consumió por 10
años; sin embargo, los presidentes (Bill)Clinton y Barack Obama consumieron
para probar de qué se trata”.
-¿Usted la ha consumido?-
“Yo no, nunca”.
-¿Dejaría que sus hijos la consumieran si fuera
legal?-
“No, yo los educo
para decirles “¿para qué te metes en eso?”, es que la información en casa es
muy importante. Pero si al final ellos dicen “voy a probar” no los voy a
agarrar a cachetazos”.
-¿No lo vería mal?-
“Si lo hacen con
moderación y bien hecho, como tus hijos o los hijos de otro”.
-¿Cómo ve el sistema judicial?-
“La justicia
mexicana es todavía una gran interrogante, y si me dijeras si una reforma a
todo el sistema judicial hubiera sido más importante que la de energía mi
respuesta es sí; y ojalá esa reforma, que a nadie le interesa, se hiciera
porque la justicia en México está muy rezagada”.
“Calderón, de mecha
corta”
-¿Durante la transición hubo algún distanciamiento
con Felipe Calderón?-
“No, en ese momento
fue al revés, tuvimos pláticas muy constantes. Y la única diferencia, es que yo
insistí en que el Ejército no debía de llevarse a la lucha en las calles contra
el crimen organizado, que eso era un error”.
-¿Él lo planteó desde entonces?-
“Yo se lo dije voluntariamente,
yo ya anticipaba que por ahí quería caminar y con absoluta claridad y más de
tres veces le señalé mi punto de vista, y claro yo tenía que respetar el de él,
pero mi punto de vista era que no resultaba conveniente meter al Ejército a
hacer una tarea policiaca; lo que es más, le di una receta, muy ranchera: si
quieres más gente pues cámbiales el uniforme, si ya están preparados cámbiales
del verde al azul de policías, entonces ya tienes todos los policías que
quieres.
“El Ejército no
está para eso, los ejércitos en cualquier lugar del mundo normalmente son
violadores de derechos humanos. Los ejércitos están para garantizar la
seguridad de la Nación, y cuando la seguridad está en riesgo y la soberanía de
una nación, bueno se puede ser muy cercano a violador de derechos humanos
porque está un principio superior de por medio”.
-¿Hoy en día cómo es su relación con el ex
presidente Calderón?-
“Fría, fea,
lejana”.
-¿En qué contexto se dio el distanciamiento?-
“A partir de mis
declaraciones en dos sentidos, yo estuve insistiendo que esto del Ejército no
caminaba, que más y más muertos es lo único que estaba habiendo ¿Dónde están
los procesos jurídicos para cada uno delos 80 mil muertos? Simple y
sencillamente se hizo una “fosa común virtual” y se aventaron ahí 80 mil
muertos que nadie averiguó, no hubo Procuraduría, simple y sencillamente se les
presentó como culpables, nadie lo demostró; eso fue garrafal, terrible, eso en
ninguna democracia debe de suceder, no puede ser que en aras de la paz y la
tranquilidad agarres a golpes a todo mundo”.
-¿Es equiparable a un genocidio?-
“Es una violación
flagrante al debido proceso que nos garantiza la Constitución a cada ciudadano;
es una violación flagrante a los derechos humanos, el solo hecho de presentar a
una persona en cuanto la capturan como culpable ante la opinión pública es una
violación flagrante a los derechos humanos”.
-¿Hubo en la transición algún pacto no escrito
entre ustedes?-
“Absolutamente no,
somos dos caracteres totalmente diferentes, como el agua y el aceite. Maquiavelo
decía “tú ganas el respeto dela gente ejerciendo de manera fortuita el poder”,
y entonces la gente te respeta por miedo; mi héroe, San Ignacio de Loyola,
decía “tú ganas el respeto de la gente por la vía del amor, del diálogo y el
convencimiento”. Este es mi estilo, el de Calderón, que es de “mecha corta”, es
el otro estilo. Creo que Calderón armó de nuevo la “presidencia imperial”,
cuando mi esfuerzo fue por transformar la “presidencia imperial” del PRI de
todos los tiempos”.
-¿Está el crimen organizado detrás de la muerte de
los dos secretarios de Gobernación?-
“Tengo que quedarme
con la idea de que fueron accidentes, mientras no se demuestre lo contrario. Si
la lucha de Calderón contra el crimen se alimentó por su enojo, su deseo de
venganza, por eso (su lucha habría sido)peor aun”.
“Apoyé a Peña
Nieto”
-Durante la campaña presidencial usted apoyó
abiertamente al candidato del PRI (Enrique Peña Nieto), porque dijo que era la
mejor opción. ¿Qué lo motivó a hacer eso?-
“No fue una
decisión gratuita, fue muy reflexionada y comentada con él.
“Reflexionaba
primero, porque venía ya un desgaste importante en la capacidad del PAN de
sacar adelante las reformas. Veníamos de una votación de 43%-42.5%, la mía; una
votación de 36%, la de Calderón, y si bien le hubiera ido a Josefina, de 32% en
su caso. ¿Cómo gobiernas un país con32% de los votos? Entonces, mi primer punto
era cómo buscamos consenso, cómo logramos que la presidencia tenga mayoría en
el Congreso para poder hacer cambios estructurales de fondo, y no teníamos eso,
que, por cierto, no lo tuvimos en el pasado. En ese análisis se suma además que
la campaña del PAN iba muy mal estratégicamente, estaba dividida, pues el
presidente Calderón quería otro candidato. Por tanto nada apuntaba a que
lográramos un triunfo que diera capacidad de conducir.
“Por el otro lado,
el PRI mostraba esa capacidad, y más que el PRI —que yo no estoy con el PRI
para nada, ni seré priísta jamás, ni lo apoyaré— estoy apoyando a una persona
con la cual tuve muchos tratos y negociaciones de gobernador a Presidente y de
Presidente a gobernador y que todas fueron buenas. Yo tenía una magnífica
impresión de él como nueva generación del PRI, nada en el cuerpo de él ni en la
mente de él es el viejo PRI, como mucha gente pretende endilgarle a Enrique
Peña.
“Entonces a través
de ese conocimiento y de la posibilidad real de dar un “lulaso”, en alusión al
Presidente Lula, donde podía alcanzar una mayoría suficiente para llevar a cabo
los cambios, le dije: “Enrique yo puedo apoyar aquí siempre y cuando tengas el
compromiso de que vas a llevar a cabo las reformas”, y él me dijo: por total
convicción las voy a hacer, voy a hacer la reforma fiscal, voy a hacer la
reforma de energía y voy a hacer la reforma educativa”.
-¿Se comprometió con alguna otra reforma?-
“Esas son las que
yo veía indispensables para el país, sin eso seguiríamos el camino al
precipicio. Ahora, las reformas tampoco fueron el non plus ultra, me quedé
bastante insatisfecho con la fiscal, ahí era claro quela reforma debió haber
sido el IVA a todos los productos y seguir reduciendo el Impuesto Sobre la
Renta. Ahí que me disculpe el presidente Peña, pero no fue la mejor. La
educativa está bien apuntada aunque tiene más terreno que recorrer: se necesita
infraestructura de calidad y cambiar los contenidos educativos radicalmente. Y
en el caso de la energética, me parece el mejor logro, espero que la secundaria
amplíe más, y que no se deje (Peña Nieto) impresionar por el PRD y por
(Cuauhtémoc) Cárdenas, ya que si la secundaria no va a fondo, la inversión no
va a llegar”.
-¿Quién buscó a quién? ¿Usted buscó al hoy
Presidente? ¿Él a usted? ¿Cómo se dio el encuentro?-
“Las dos cosas. Él
vino aquí al Centro Fox, y yo lo busqué, precisamente buscando tener
información para poder evaluar de manera razonada lo que iba a ser mi voto, y
más allá de mi voto lo que iba a ser mi respaldo. Sé y sabía que me iba a
llevar la etiqueta de traidor del PAN, pero no pienso en un partido, pienso en
mi querido México y pienso en los pobres en México, pienso en los 80 mil
muertos del sexenio de Calderón, pienso en esos jóvenes que son los “ninis” y
quiero soluciones para eso”.
-La alianza con el hoy Presidente, ¿es sólo por
estas tres reformas o hay algo más a largo plazo?-
“Nada más, y es
digamos espiritual, no hay ningún arreglo pragmático-material de ninguna
especie, yo no he vuelto a hablar con él directamente desde que asumió la
Presidencia”.
-Además de que el presidente Peña saque las
reformas estructurales, ¿qué otra cualidad le ve?-
“Es una persona
decente en el sentido de honestidad y de transparencia; quizá la cualidad más
importante es formar equipo, es no sentirse el Papa ni Papá Dios”.
-Usted comentó que al condonar la deuda de Cuba el
gobierno federal retrocedía hacia el viejo PRI. -
“A estos
“dictadorzuelos” que no dejan en libertad a sus ciudadanos, ¿para qué les
andamos dando coba o para qué los tenemos que apoyar? Al revés”.
-¿Este tipo de decisiones hacen pensar en el viejo
PRI?-
“Desde luego. Es un
apego a la vieja cultura priísta que ni siquiera creo que sea del propio Peña,
viene de la cultura priísta. Eso cambió con el PAN, nos abrimos al mundo. Aquella Doctrina Estrada ya “chole”, ya está como
el petróleo, es muy antigua; ese “te respeto pero me respetas aunque tú hagas
tropelías y yo también” no funciona en una democracia”.
Oceanografía
-¿Tiene alguna relación su familia con
Oceanografía?-
“Absolutamente ninguna
relación, ninguna información, nada que tenga que ver con el caso de
Oceanografía, ni en la cuestión de los contratos ni mucho menos en cualquier
otra insinuación calumniosa.
“En la familia, la
propia y la ampliada, estamos muy tranquilos, cero preocupación”.
-¿Tiene fondo político para afectar a panistas?-
“Es un buen manjar,
eso rinde dividendos a uno que otro político del PRD que constantemente están
filtrando cosas que no son ciertas”.
-¿Esto tiene relación con la reforma energética?-
“El gobierno federal
necesita desahogar este tema, está perjudicando seriamente los temas de las
reformas en energía que tanto trabajo le costó sacar al presidente Peña. Acabo
de hacer un recorrido por Nueva York, por Dubai, por muchos lados, y esto es un
balde de agua fría sobre la reforma. Todo mundo afuera se pregunta qué vamos a
hacer con un Pemex que sigue en corrupción y metido en problemas”.
-¿Se usa como moneda de cambio por la reforma?-
“El PAN ha perdido
la brújula, ha perdido los principios, ha perdido las convicciones. Es
absolutamente claro que el PAN debe de respaldar afondo esta reforma en energía
y por supuesto debe respaldar a fondo la transparencia, la rendición de
cuentas”.
“Somos pareja
muégano”
-¿Ha visto la serie “House of Cards”?-
“No, pero
platícamela”.
-Es una serie de televisión estadounidense donde un
congresista y su esposa comparten un ideal de vida, e independientemente de las
críticas o de la ética y de la moral buscan a toda costa lograr sus objetivos-.
“Me describes a
Marta (Sahagún) y a mí con esa pequeña historia, la cohesión de Marta y mía
está fundamentada en el amor, en compartir el sueño, el propósito, el objetivo,
la meta, de manera muy cohesionada, como un muégano. De hecho ambos estábamos
en las filas del sector privado y coincidentemente en la misma época nos
movimos a la brega política porque queríamos hacer algo por nuestro país,
porque queríamos luchar por los pobres, y eso nos dio esta gran cohesión y esta
gran unidad de propósito, que se ha mantenido a lo largo del tiempo, antes de
casarnos, y de casados, y yo creo que hoy puedo afirmar que hasta que muramos.
Siguen las críticas, siguen las zancadillas, pero nosotros no nos desviamos de
ese camino”.
“Salinas sobrevivió
de milagro”
La elección
presidencial de 1988 fue muy cuestionada; sin embargo, precisamente por eso se
convirtió en el parteaguas de la democratización.
En aquellos tiempos
se observaba corrupción a diestra y siniestra y todas las demás lacras que se
generan cuando hay un monopolio en ejercicio del poder. Fueron tiempos en los
que el PRI estaba siendo atacado por dos flancos: la creación del PRD y el
desmembramiento del priísmo, y el flanco permanente de brega del PAN, que venía
desde los años 30, desde su creación misma. A todo eso hay que agregar el deseo
del pueblo de México por un cambio.
Ante todo este
movimiento “el náufrago (Carlos) Salinas” alcanzó a agarrarse de la tablita.
Sobrevivió de milagro con los eventos que lanzó, aquel de La Quina y otros más
para tratar de recuperar alguna legitimidad democrática, que no tenía ninguna.
(El del 88) fue un fraude monumental.
En la caída del
sistema estuvo metido “el Bartlett” y todos sus secuaces en sus afanes de darle
al pueblo de México una vez más “atole co nel dedo”.
-¿Cuál es su relación actual con el ex presidente
Salinas?-
“Es una relación
distante pero creo que al paso del tiempo uno va ganado madurez. Hoy, una cosa
que jamás hubiera hecho mientras estaba en la brega y en la lucha, puedo
reconocer acciones muy importantes que Salinas hizo a favor de México. Desde
luego el Acuerdo de Libre Comercio, ese fue una hombrada, ese fue luchar contra
todo, a viento y marea, y sacar adelante eso que hoy para México ha sido uno de
los instrumentos de desarrollo. Así que hay que reconocerle lo que es
reconocible, hay que también ver que sus últimos dos años dejaron muchísimo que
desear, se le salió el país de control y cayó en el mareo permanente de todos
los priístas que no saben mantener los pies en la tierra y se les sale de control
el país o de plano lo destrozan. Ahí está la historia de (José) López Portillo.
“Nadie le ha
causado más mal a este país que (Luis)Echeverría por un lado y que Lázaro
Cárdenas por el otro. Creo que han sido los grandes destructores de la
posibilidad de que este país ya fuera de primer mundo el día de hoy: por sus
populismos, por su demagogia, por sus ideas “izquierdizantes-comunistas”, nunca
comprendieron que ese no era el camino, se fueron con la finta, creyeron en lo
prevalente del momento y se olvidaron de lo trascendente de un rumbo para un
país, y de que la economía de mercado y la democracia son los verdaderos
caminos”.
-El que haya habido un distanciamiento entre usted
y Salinas, y uno entre Zedillo y Salinas, ¿los unió y los identificó?-
“No, yo no veía personas
en ese momento, yo veía una causa, tenía una fijación clara: sacar al PRI de
Los Pinos, no me importaba quién estuviera ahí, no me importaba el
comportamiento, la imagen. Entonces como un buen “golpeador”, buscando que
cayera el fruto, a “Zedillín” le pegué una y otra vez que pude. A Salinas hoy
puedo reconocerle algunas cosas, otras no; Zedillo lo mismo, hoy puedo
reconocerle muchas cosas buenas que hizo, y sobretodo su cierre, ese acto de
majestad, ese acto de visión, él sale y hace el reconocimiento, dice: “Se
acabó, ganó Vicente, así que los agresivos y las huestes violentas del PRI
apláquense porque ya nos tocaba entregar el poder”. Ya estaba muy desgastado el
PRI, ya no tenía nada más que ofrecerle a México, y mira lo que ha pasado, hoy
los tenemos de regreso, esa es la democracia”.
-En el proceso de transición entre Zedillo y usted
¿por qué no hubo, a diferencia de otros sexenios, una investigación a fondo de
la gestión de los funcionarios? ¿Hubo algún pacto con Zedillo…?-
“Mira,
lo haces (las investigaciones), pero el que hace tropelías en este país las hace
bien, y las ha hecho bien históricamente. Casi todas las denuncias tienen propósitos
políticos, así fue La Quina, así fue La Maestra, así fueron todos los que han
caído en la desgracia, ha sido porque había necesidad de un hecho político. Hay
muchos culpables en la calle, está atascada de gente multimillonaria, de ex
funcionarios públicos, y ahí están tranquilos”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por visitar el Diario Digital Imprevistosnoticias.blogspot.com; te agradeceremos nos anexes tus numeros telefònicos y nombre para dar seguimiento puntual a tus propuiestas.
Atentamente
La Coordinaciòn General