Chimalhuacan, Estado de México.- El ex marchista mexicano Noé Hernández, quien fue baleado en un centro nocturno de La Paz Edoméx, la madrugada del 30 de diciembre, regresó al hospital para guardar reposo absoluto y recuperarse de una cirugía oftalmológica que se le practicó la semana pasada.
Hernández había abandonado la Clínica de Neurotraumatología el martes de la semana pasada, pero regresó el jueves para ser operado y para guardar reposo porque en su casa tenía demasiada agitación.
“Se le recomendó cuatro días de reposo, pero reposo absoluto. Sin hablar, sin moverse”, dijo Carlos Castillo, director de la clínica, en conversación telefónica." la doctora Noemí Cortés pasó hoy a revisión y todo va bien, mañana lo revisará nuevamente y podría darlo de alta”, añadió.
Tras la cirugía, se pudo establecer que Noé Hernández salvó el ojo derecho; aunque aún no es posible dar un pronóstico sobre su funcionalidad para recuperar la visión. Lo que sí exigen los médicos será un reposo absoluto, incluso hablar lo menos posible, para evitar algún daño.
“Se quedó en la clínica para que ande totalmente controlado, que no ande tan alborotado porque sino se le echa a perder la cirugía que se le hizo en el ojo”, dijo Castillo, consciente de que la demanda de entrevistas y visita de familiares ha fatigo al ex marchista.
“Han sido días muy absorbentes para él, y también hiperactivo el asunto. Pero ya por eso los familiares estuvieron de acuerdo en que estuviera en la clínica cuatro días en reposo absoluto, recostado y todo tranquilo”, finalizó
Hernández había abandonado la Clínica de Neurotraumatología el martes de la semana pasada, pero regresó el jueves para ser operado y para guardar reposo porque en su casa tenía demasiada agitación.
“Se le recomendó cuatro días de reposo, pero reposo absoluto. Sin hablar, sin moverse”, dijo Carlos Castillo, director de la clínica, en conversación telefónica." la doctora Noemí Cortés pasó hoy a revisión y todo va bien, mañana lo revisará nuevamente y podría darlo de alta”, añadió.
Tras la cirugía, se pudo establecer que Noé Hernández salvó el ojo derecho; aunque aún no es posible dar un pronóstico sobre su funcionalidad para recuperar la visión. Lo que sí exigen los médicos será un reposo absoluto, incluso hablar lo menos posible, para evitar algún daño.
“Se quedó en la clínica para que ande totalmente controlado, que no ande tan alborotado porque sino se le echa a perder la cirugía que se le hizo en el ojo”, dijo Castillo, consciente de que la demanda de entrevistas y visita de familiares ha fatigo al ex marchista.
“Han sido días muy absorbentes para él, y también hiperactivo el asunto. Pero ya por eso los familiares estuvieron de acuerdo en que estuviera en la clínica cuatro días en reposo absoluto, recostado y todo tranquilo”, finalizó
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