CUERNAVACA, MORELOS. Los problemática
que plantean las nuevas tecnologías y el fortalecimiento, por la impunidad
prevaleciente, de los enemigos de las libertades de prensa y expresión, fueron
analizadas en sendas reuniones y en entrevista radiofónica, con nuestros
distinguidos colegas visitantes, Juan Carlos Camaño, Presidente de la
Federación Latinoamericana de Periodistas, FELAP, y Leandro Torres, secretario
de Relaciones Públicas de la Unión de Trabajadores de la Prensa de Buenos
Aires, UTPBA.
En el programa periodístico “Entérese”
de Teodoro Raúl Rentería Villa que alterna con Fabio Fuentes, mismo que se
transmite diariamente de 8 a 10 horas por Radio Capital Morelos, se analizaron
dichos retos que afrontan los periodistas en todo el orbe, mismos que están
cambiando los paradigmas que hasta hace poco eran plataforma de nuestro actuar
cotidiano.
En la sede Club Primera Plana,
que alberga en la Capital del país a FELAP-México, abundamos sobre los agravios
continuos y continuados contra los periodistas y sus medios, sin que hasta
ahora se vislumbre una acción de las autoridades para frenar estas acometidas
contras los informadores.
Participaron coincidentemente Raúl
Gómez Espinosa, José Luis Uribe Ortega, Inocencio Rodríguez Barrera, Sergio
Romero Ramírez, Adolfo Mendoza Reyes y el autor, presidente, secretario
general, socios y presidente del Colegio Nacional de Licenciados en Periodismo,
respectivamente, con el análisis e investigación de la ONG, Artículo 19 de la
Organización de las Naciones Unidas en el sentido de que los crímenes contra
los periodistas en mayor porcentaje son imputables a funcionarios de los tres
niveles de gobierno.
En la entrevista radiofónica, se
abordó el futuro de los periodistas, cuando por las nuevas tecnologías o mejor
dicho por el abuzo de los patrones, el trabajo de los periodistas en utilizado
en los medios escritos, televisivos, radiofónicos y en las redes sociales, bajo
el régimen abusivo de una paga y además de bajo monto.
Otro planteamiento, es el
abuso incontenible de supuestas informaciones no verificadas lanzadas por
supuestos periodistas, que causan alarma y desasosiego en la sociedad, mismas
que a la postre, derivan en desprestigio del periodismo en general. Cuando se
hacen las aclaraciones correspondientes el daño está hecho, mismo que se va
multiplicando en forma geométrica.
Desde luego concluimos, que no
debemos de arredrarnos y que la lucha por las libertades primarias es diaria y
continúa y que parte fundamental para afrontar los retos presentes y del futuro
inmediato, tiene como primer y vital meta, la continúa y tenaz
profesionalización del periodista.