Reformas que impulsa Peña Nieto tienen un profundo sentido social: Ana Lilia Herrera

·        Congruente el PRI con sus convicciones no aprobó gravar alimentos, medicinas, colegiaturas e hipotecas

·        La dirigente nacional emetista le tomó protesta al nuevo líder del MT en Durango 

Las reformas impulsadas por el presidente Enrique Peña en materia energética, hacendaria y educativa tienen un profundo sentido social y están diseñadas para servir a todos los mexicanos, pero en especial a aquellos que menos tienen, aseguró la senadora Ana Lilia Herrera, secretaria general del Movimiento Territorial del PRI.

Luego de tomar la protesta estatutaria a Ricardo Benavente como dirigente del Movimiento Territorial en Durango, Herrera Anzaldo destacó que congruente con sus convicciones, el PRI ha expresado en los hechos su compromiso con los mexicanos al no gravar con IVA en alimentos, medicinas, colegiaturas y créditos hipotecarios.

Reiteró que la reformas energética, hacendaria, financiera y educativa, constituyen el impulso que necesita el país para tener una economía más productiva y competitiva, en beneficio de todos los mexicanos. 

Con la asistencia del gobernador de la entidad, Jorge Herrera Caldera y del presidente del Comité Directivo Estatal del PRI, Otniel García, la dirigente nacional emetista hizo un llamado a toda la estructura nacional y estatal, a desmitificar los falsos debates en las reformas propuestas por el Ejecutivo y a ser los promotores de los verdaderos alcances y beneficios de las mismas.

Sobre el tema de la reforma energética, Ana Lilia Herrera precisó que uno de los objetivos de la misma es hacer que las empresas compartan el riesgo que hoy sólo es de Pemex.

“Que no se diga que tiene intenciones privatizadoras, que se diga la verdad, queremos que los riesgos sean compartidos”, hizo hincapié en que las empresas Pemex y CFE son y seguirán siendo cien por ciento mexicanas.

Ante aproximadamente mil 500 asistentes, la dirigente nacional del MT reconoció la fortaleza del priismo y la capacidad para escuchar y realizar los ajustes necesarios para que el gasto se oriente siempre a las demandas sociales.