¡ DESAPARECIDOS !
Mientras miles o millones de padres de familia pudieron abrazar a sus hijos ayer y otros acudieron a algún panteón para añorar aquellos momentos cuando la vida les sonreía, hay otros en cuyo corazón se anida el dolor, una combinación entre esperanza de volver a verlos y los momentos cuando se quiebran por no saber cuál ha sido su suerte. Justo es lo que viven los padres de aquellos jóvenes que después de haber salido a divertirse, terminaron desaparecidos.
Dicen que son las madres quienes sufren más el dolor de perder a un hijo, sin embargo pocas veces se voltea la mirada para ver el rostro de los jefes de familia, quienes tienen que continuar trabajando, sosteniendo a la prole o guardado sus lágrimas para la regadera o la soledad, porque alguien tiene que se el sostén.
Sin embargo, al celebrarse el Día del Padre son un sector de los que nadie puede olvidarse, pues a pesar de portarse como verdaderos "machos", por dentro sufren igual que una madre al no saber cuál ha sido la suerte de sus hijos, y peor aún, no poder dejar el trabajo para dedicarse de horario completo a detectives para hallar alguna pista que los lleve a saber dónde están sus retoños.
En uno de los casos conocidos, son 5 de los cuales poco se habla, lo que no implica que la autoridad sepa dónde están o tenga alguna línea de investigación, de manera que algunos familiares como el señor Jorge Casasola, padre del joven Jorge Daniel Casasola, no pudo tener peor día, pues el abrazo de cada año se convirtió en desesperación.
Sobre todo porque se trata del segundo caso de una desaparición masiva que las autoridades insisten en llamar "ausencia".
Para este padre de familia la sensación de dolor es compartida con los de otros 4 jóvenes que el pasado 21 de abril estuvieron en el bar Virtual Mix, donde fueron vistos hasta las cinco de la mañana por un testigo que asegura departió con ellos, pero fue al baño y al volver no estaban más.
Cinco historias que este domingo dolieron aún más cuando al despertar sus padres se percataron que no se trató de una pesadilla, sino de la realidad en la que nadie sabe dónde están Jorge Daniel Casasola López, de 19 de edad; Jonathan Aztivia Velázquez, de 27; Rodrigo González Villegas, de 15; Luis Orlando Flores García, de 20, y Jonathan Barrios, de 22.
Ayer la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal dijo a familiares de los desaparecidos que cuenta con una importante línea de investigación, pero esto no aminoró el dolor de sus padres, para quienes ayer 16 de junio, será una fecha imborrable, ya que en lugar de un abrazo del Día del Padre solamente tuvieron sillas vacías, camas tendidas desde hace casi dos meses, computadoras que no han sido abiertas, redes sociales inertes y un abrazo al aire porque aquellos que otros años les dijeron "papá te quiero", esta vez nadie sabe dónde pueden estar.
Quienes también sufren por no saber dónde están sus hijos e hijas son los padres de los 12 "ausentes" tras haber asistido al After Heaven de la zona rosa, pero por ser de Tepito han sido criminalizados y despojados de su naturaleza de padres, negándoles el derecho de llorar porque sus vástagos están desaparecidos.
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